2023/10/15

[181.5] DE ARCADIO CHAVES N. Y LAS "FAIBLESSES" DEL RELATO 'MORATÓ'

Espero que mi insistencia dé sus frutos, y que Ud., Sra. Morató, tenga el coraje de salir a la palestra a reconocer la verdad de mis enunciados a los 4 vientos, a no ser que decida seguir la poco decente vía Gª Trapiello. Desde aquí y ahora le emplazo a ello en público.

Tampoco descarto encontrar algún día un periodista 'virtuoso' en el lupanar de la prensa hispana -apreciación de carácter muy general, por descontado, no deseo que se me ofendan las huestes del Power without responsibility the prerogative of the harlot through the ages, que dijera Sir. Stanley Baldwin en su día, que dé a conocer la verdad material de unos hechos que 'van a misa'. 

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Al proseguir mi averiguación, acaba de entrar en escena -de modo imprevisto por completo- Arcadio Chaves Nogales, hermano de Manuel, y un sobrino por vía materna: Manuel García Nogales. Los indicios apuntan a que fueron acogidos en el seno familiar de nuestro reportero, en marzo de 1939. Un documento que he recibido de los Archivos galos le domicilia en el nº 44, Place Jules Ferry; el de su frère Manuel.

Composición a partir de una ficha de Arcadio Chaves Nogales

¿En qué medida esa presencia influyó no ya en el transcurso de los hechos, sino en el universo de los sentimientos que se agitaban en el interior de nuestro protagonista, en los momentos en los que decidía y consumaba la separación de los suyos? Qué sería de su hermano, y de su sobrino, ¿no son preguntas que también se hubo de hacer al abandonar París?...

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[Cont. de 181.3*]

8. Lo que voy conociendo ha suscitado en mí una reflexión acerca del modo en el que me he acercado (nos acercamos, quizá, podría aventurar) al maestro Chaves. Insensible, me atrevo a decir, por lo general, ante lo atroz de su sino y el de sus allegados. Aceptaré mi falta de perspicacia a la hora de captar elementos que, pensándolo bien, son bastante palmarios. Al fin y al cabo, mi abuelo materno Vicente Grau Mañanet (Graus, [E], 1896—Montauban,[Fr], 1982) vivió las vicisitudes del exilio republicano como muchos otros españoles, que tuvieron que dejar de serlo por su adhesión a un sistema de pensamiento, sin que ello supusiera -en la época, hallarse en ninguna vanguardia de la acción política. Es el sino atroz que tiñe una guerra fratricida y por ello, incivil, cainita y sanguinaria en grado sumo..., A sangre y fuego, lo acredita.

Solo deseo confiar en que esa falta de perspicacia no haya tomado rasgos displicentes en lo que concierne a mi acercamiento al reportero sevillano, cosa que, de haber sucedido, lamentaría en mucho. 

Ese contraste entre una determinada prosa, la de Y. Morató, por lo general categórica en sus asertos, y la realidad de los hechos, me lleva a desdecirme de lo que señalé al final de [181.3*] -He comenzado en la p. 9; voy por la 12. Vale-. 

Pues no, me disculpo porque, al menos, voy a dar un nuevo paso para desmenuzar lo que leo en los párrafos del trabajo de Y. Morató que dan comienzo en las pp. 15 a 19 (que enumero, de «1 - 'Emery Reves y sus conexiones...'» con cifras romanas).

I. La huida de MChNg (permítaseme la abreviatura) a Inglaterra es... (ya lo siento; al leer eso, huida a, entiendo un destino bien determinado en el punto de partida, algo que no encaja con el acercamiento de ChNg al rincón pirenaico en el que pensó podría recibir escondite (Es curioso, tiempo después, 1941, en lo que sería zona ocupada alejada de los frentes de batalla, en concreto en el departamento 82, Tarn et Garonne, del que tengo el testimonio directo de mi abuelo, las explotaciones agrícolas, las fermes, eran 'santuarios' en los que los ocupantes no solían husmear: de sus cosechas y recolecciones provenía su aprovisionamiento.). Por otra parte, a mi modo de ver, ChNg huye a Burdeos -él, sujeto activo-, y es evacuado al UK desde Burdeos, -él sujeto pasivo: activo solo en cuanto que asintió)  ... sin duda, uno de los acontecimientos clave en su biografía que se han narrado con menos acierto... (p. 15), a excepción Sra. Morató, -he de repetirlo, y espero que mi insistencia dé sus frutos y que Ud. tenga el coraje de salir a la palestra a proclamar la verdad de mis enunciados a los 4 vientos, a no ser que decida seguir la poco decente vía Gª Trapiello-, de la narración contenida en varias entregas en este blog, que firmo de punta a cabo, de cuya publicación le he informado debidamente: ¡Ud. bien lo sabe!. Su mujer e hijos perdieron el rastro de su paradero el día en que el periodista se vio obligado a abandonar el hogar en el nº 14... 

Veamos, yo quisiera tener la explicación de cómo, si sus familiares perdieron el rastro, Pilar, su hija mayor, pudo ofrecer testimonios generosos... que permitieron conocer en detalle sus andanzas justo hasta su destino final (p. 9). Mire que no digo que no la haya, digo que la echo en falta porque, sin ella, no soy capaz de atar cabos. Por otra parte, ChNg manifiesta en un documento vivir en el nº 44, no en el 14.

Detalle de un documento suscrito por Manuel Chaves Nogales

Esta separación ... ha marcado el desconocimiento de todo lo que vino (p. 16) después. Ningún investigador ha emprendido la tarea de determinar con precisión y, sobre todo, con registros contrastables, cómo fue la vida de ChNg ... en Londres. Más de lo mismo, Sra. Morató. Ud. me tilda de investigador independiente en la p. 39..., y, salvo su alojamiento en el Savoy,  elude todo el resultado de mi averiguación, sustentada en registros contrastables. Pero es que, además, entre la llegada al UK/Londres y su salida de París, está su navegación en el contratorpedero, precisamente el episodio que he elucidado y que Ud. omite en ese pasaje pues 'salta' de la última jornada parisina de ChNg, de modo directo, a Londres. 

   Los datos... que hasta ahora conocíamos, están plagados de errores e imprecisiones que urge rectificar..., creo que no vale la pena insistir en lo que a mí me concierne; ... pues la manera en que el periodista salió de Francia determinó sus primeros años (otra indeterminación: su estancia no llegó a 4...) en Inglaterra; espero que esa afirmación quede bien asentada con registros contrastables en lo queda por leer.

II. En el relato de los hechos de aquel último día en familia que ofreció su hija Pilar, hay un dato a no perder de vista y que doy por sentado: que ChNg deja París dos días antes de la entrada de los alemanes; es decir, el 12. Lo más probable en las horas de tránsito del 11 al 12: ganar unas horas, o no perderlas, era crucial en momentos verdaderamente angustiosos.  

Pero el relato de Pilar ofrece alguna inconsistencia: "... ha conectado con el gobierno francés en Burdeos...", se le atribuye. Ahora bien, el gobierno francés no solo no estaba en Burdeos ese último día en familia, sino que desechó el santuario bretón, otra posibilidad que consideraba como reducto, en el último momento, en Tours.

Detalle de un documento oficial británico. El pasaje está fechado a 11/06/1940

III. (p. 17) El periodista sevillano salió, en efecto, de manera sorpresiva para la familia... O se me establece muy bien el alcance de esa expresión -sorpresiva, o tendré que negar la mayor. Un mes después de acabada la drôle de guerre, con las tropas alemanas avanzando de manera que no dejaba dudas de la debacle francesa, en los entresijos de la información, ChNg sabía más que de sobra lo que se cernía, y su familia, también; en ese sentido no cabía sorpresa alguna. Ahora bien,  si por sorpresiva nos limitamos al estricto momento en el que había acordado irse -porque no me cabe duda que su huida de París a Tours, en primer lugar, la hizo acompañado, sea. Por lo demás, era algo absolutamente previsible. Y previsto con el mayor sigilo, con toda discreción, y con total cautela: la apuesta era a vida o muerte; ni más, ni menos.  

De permanecer en Francia seguramente habría entrado a formar parte del Special Operations Executive (SOE)... como le sucedió a Thomas Cadett... Esto ya es el no va más, y me provoca pasmo... de permanecer ¿.... qué sentido tiene tal hipótesis?; permanecer, ¿cómo..., en qué Francia?; habría entrado... ¿que habría entrado en el SOE...?; ¿dónde está la prueba, el registro contrastable, Yolanda, que lo acredite...? ¡Historia contra-fáctica!: suposición acerca de lo que pudo ser cuando se sabe positivamente que no fue; esto no es serio, lo siento. En cuanto a Thomas Cadett, fue reclutado en efecto por el SOE durante su estancia en París, que acabó como la de otros muchos colegas de la prensa anglosajona: viaje a Burdeos y evacuación en el Madura.  

IV. (p. 17) La decisión de borrar cualquier rastro, por pequeño que fuera, de su actividad en Francia le salvó la vida... Lo siento: no entiendo nada. A ChNg le salvó la vida el esmero que puso el Foreing Office en poner a buen recaudo aquel grupo de franceses privilegiados, como lo describe Alexander Werth. Grupo del que no sé cómo llegó a formar parte pero, sin duda, a resultas de una tupida red de relaciones bien fraguadas por afectos, coincidencias de puntos de vista, y un compromiso político-informativo a favor de la causa de la libertad -radicalmente opuesto a la aberración nazi,  que le hicieron acreedor de tal distinción. 

Es posible que borrar cualquier rastro sirviera para salvar la vida de sus allegados, que no es poco, pero, la suya..., !por favor...! 

V. (p. 19) Hasta la redacción de estas páginas..., una referencia cronológica incontrovertible: clara, inequívoca y precisa ¡qué falta de respeto al lector! 

VI. Núñez Díaz de Terán..., si no hemos alcanzado la plena apoteosis del despropósito, a punto andamos. Esto dije en su día (06/03/2022; [146-2]), no sé si antes o después del momento de esa singular redacción... 

Reproducción parcial del comienzo de [146.2]
 

¿Qué otro sentido puede tener el citar al Sr. Núñez, de cuyas afirmaciones ningún registro contrastable tengo (o se tiene, ¿acaso no existe...?) -con el que al menos he tratado de contactar en un par de ocasiones, sin éxito-, que no sea meter el dedo en el ojo? ¿Y en qué ojo...? ¿En el de Maribel Cintas...? Porque Sra. Morató, la afrenta que me inflige es palmaria: le urge citar al Sr. Núñez, de cuyos asertos -negro sobre blanco, nadie conoce nada con exactitud, en tanto que ha de esperar unas cuantas páginas más (hasta la 39) para dar cuenta de un registro contrastable aportado por un investigador independiente... Fernando Caro, a la vez que elude unos cuantos más del mismo tenor y autor.

Sra. Morató, qué quiere que le diga: que para mí, lo leído hasta ahora, es de traca... 

Así que acabaré repitiendo que me es absolutamente indiferente el que esto se difunda, o no, entre la Santa Cofradía de los Hermanos Silentes del conglomerado nebuloso ChNg2023. Me adhiero al aforismo de Gracián, así que ya llegarán tiempos mejores. Al fin y al cabo, como dije hace poco a un destinatario, no descarto encontrar algún día un periodista 'virtuoso' en el lupanar de la prensa hispana -apreciación de carácter muy general, por descontado, pfv., no se me ofendan los del Power without responsibility – the prerogative of the harlot through the ages-, que dijera Sir. Stanley Baldwin en su día, que dé a conocer la verdad material de unos hechos que 'van a misa'. Que en Francia tardara casi 9 años en toparme con uno, no supone que aquí vaya a ser igual...  

Ahora sí, ¡vale! Mi ánimo no me da para más...   


2023/10/08

[181.4] POR QUÉ ESCRIBO SOBRE CHAVES NOGALES

La verdad siempre llega la última, y tarde, coxeando con el tiempo...

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(FINAL DE LA SERIE 181) 

Escribo sobre Chaves Nogales por el impacto que la lectura de La agonía de Francia causó en muchos órdenes de mi vida. Lo hago -o pretendo-con total respeto aunque sin veneración ciega; con el propósito de hacerlo con serenidad y honestidad absolutas, con el deseo de presentar las cosas como son para hallar los hechos verdaderos y almacenarlos para la posteridad.  

De cosas sobre las que deseo llamar la atención sin mengua de mi admiración por el sevillano, uno más de un enjambre formidable de reporteros del -por acotar- período de entreguerras: Camba, Gaziel, Plá, Assía, me son los más conocidos de entre los propios -Orwell de entre los no, de esa época

Gracias a sus crónicas y reportajes dispongo -disponemos- de una visión de la Historia a pie de calle, de hecho y de crónica. Visión verdadera; carente de los estereotipos y maniqueísmos de redentores al uso y de los ortodoxos de la memoria histérica, que no es sino la presentación adulterada bien a conveniencia de la otra, la auténtica, la genuina, la verdadera... 

A Chaves Nogales le distingue su sino, malhadado, que, en primer lugar, le condujo a abominar de la barbarie cainita que se desencadenó en el yermo cultural patrio, y lo asoló más si cabe. Al poco, a un exilio parisino de 3 años y medio de duración con los suyos, que acabó con una huida -a solas, sin sus allegados- a Burdeos, y una evacuación al UK que suponía un 2º y definitivo exilio en el que, desventuras de su Hª, no le fue permitido ver el triunfo de su causa, la de la libertad..., es decir  la derrota de la peor barbarie destilada en los pudrideros orientales. 

Mi preocupación inicial es lograr que me oigan, pero se me ha confinado entre unas tapias de oscuridad de una envergadura formidable...-entre las que de hecho estoy enrejado, como prueba el nulo eco de estas entregas precedentes , cuyo nº de lecturas/lectores no sé si es es de risa o de vergüenza ajena, por supuesto-; sometido a un atronador, abisal, silencio que hiede... un saber no compartido es de la más absoluta esterilidad; apocarlo, o sofocarlo, una canallada, escribí el 24/09/2022. Allá cada cual. 

El ninguneo que refiero, mero elemento positivo, me es igual, me trae al pairo. ¡Si a mis 70 no me lo fuera, y a esas miserias les diera cabida en mi cosmos afectivo, apañado iba!. 

La verdad de mis proclamas no está en tela de juicio, ni es susceptible de estarlo, ni es cuestión cuantitativa. Si alguien da fe de mis averiguaciones en una columna de periódico, una reseña en un artículo, o un señalamiento en un cruce de caminos, se lo agradezco sin más. Ahora bien, divulgar saber recto carece de mérito alguno, es un simple imperativo moral para cualquier persona de bien que esté en condiciones de poderlo hacer, incluso si pertenece a la Santa Cofradía de los Hermanos Silentes como destacado miembro numerario. Porque, transmitir, compartir mi saber ha sido la esencia de mi menester como profesor, que no es sino una aplicación 'ordenada' de esa necesidad que constituye la esencia cooperativa de la especie... 

La seguridad que me asiste, que da alas y oxígeno al brio que he de poner en juego para sostener esta brega, y nutre mi confianza, impide que me doblegue ni me avenga a enjuague alguno (es el mismo aliento con el que he logrado que el entorno tocquevilliano de Gallimard y el Conseil de Rédaction de la Tocqueville Revue, sobre todo, hayan tenido que doblar la rodilla porque un tal F Caro, investigador tan independiente* como meticuloso, estableció hará pronto cosa de 10 años que todos los recopiladores de correspondencia de Tocqueville habían dejado en el olvido una carta americana, familiar, y conocida por autoridades tan indiscutibles como nuestro Eduardo Nolla, o el británico Hugh Broghan [1936-2019]. El nº 262 de La Revue de la Manche que se acaba de publicar, lo ratifica).

*El atributo que me dispensa Y. Morató, que encuentro de una claridad, verdad y concisión como nunca pensé que fuera a recibir; se lo he agradecido de manera personal. 

En todo caso no voy a pordiosear nada en absoluto, ¡solo faltaría! ¡Como si Galileo -eppur si muove-hubiera debido añadir a la humillación inmisericorde a la que se le sometió la de plañir y limosnear...! Apocar, sofocar, negar por la vía de los hechos la existencia de un saber bien establecido es una canallada, lo repito. Así que allá cada cual con su conducta..., y que cada palo aguante su vela.

Tampoco está en tela de juicio, ni es susceptible de estarlo, mi rigor, mi honestidad intelectual, mi apego a la verdad material de los hechos, a su respaldo con la prueba que lo avale... Ni al placer intelectual que toda esta ensalada me causa... Creo estar en las antípodas de una nebulosa en la que -seamos claros- lo que prevalece no es el ánimo de establecer verdad científica alguna sino de vender libros. 

Vender libros es muy encomiable, es lo más legítimo del mundo y, en sí mismo, nada tiene de censurable. Yo mismo he tratado de hacerlo, y lo voy a seguir haciendo con una traducción del El Antiguo Régimen y la Revolución, el clásico de Alexis de Tocqueville que antes de un mes tendrá una reedición presentada con esmero, y con mi aportación a la estela de Chaves Nogales antes del próximo mes de marzo, S.D.Q. 

Lo que es censurable es la falta de decoro, de savoir faire, de rigor -de honestidad intelectual, en suma- a la hora de elaborarlos y editarlos. Allá cada cual con su conducta..., pero que cada palo aguante su vela, repito

Recuerdo con insistencia al antiguo corresponsal de The Times en Madrid (1975-78) y de The Financial Times en México D.F. (1978-84), William Chislett. Captó a la perfección lo que se nos avecinaba cuando vio claro, hace ya más de 10 años, que Chaves era un filón inagotable. A la vez, denunció la impostura de Trapiello, que, si no lo ha hecho (si lo ha hecho lo que sigue carece de valor), debería tener un gesto de honestidad y salir a la palestra para asentar de una vez la verdad y propagarla a los 4 vientos, que W. Chislett tenía razón al decir lo que dijo (W. Chislett & Chaves Nogales): <... no es cierto que Andrés Trapiello, prologuista de la nueva edición de A sangre y fuegofue como se dice en la contraportada “el primero en señalar la verdadera importancia de esta obra”>

Quizás esa proclama sería el hito que trazara un punto y aparte a partir del cual se aborde al eximio reportero sevillano con el decoro, el savoir faire, y el respeto que merece. Esto que digo concierne a todos los asteroides que gravitan, o deambulan, en el seno de la nebulosa Chaves, los cuales, por qué no decirlo, me recuerdan a los desatinados hommes de lettres* a los que, en L'Ancien Régime et la Révolution se refiere Alexis de Tocqueville

*Cuya arrogancia y osadía les llevó -en el S. XVIII francés, a ser les principaux hommes politiques du pays con las consecuencias que ello llevó consigo

Se arrogaron el menester de la guía de la nación -en ello siguen desde entonces partout (y así está el panorama), aduciendo una incuestionable superioridad de principio por lo general jamás demostrada -la Historia lo evidencia. Hoy en día otros hommes de lettres -diferentes personas pero el mismo espíritu, bajo los mismos supuestos, se apropian de patrimonios colectivos, caso de los legados de Tocqueville, o Chaves Nogales, menospreciando lo que provenga del exterior de su formidable castillo kafkiano. Castillo en el que saltan a la vista intrigas, asechanzas, y rencillas; ese cúmulo de miserias tan humano, tan a pie de suelo...  

 En el caso del sevillano los resultados están siendo -a veces, innecesariamente mediocres; por debajo de un umbral de mínimos que deje las cosas en claro, en lugar de añadir turbidez. Creo haber aportado evidencias más que suficientes al respecto. 

La mentira es siempre la primera en todo, arrastra necios por vulgaridad continuada. La verdad siempre llega la última, y tarde, coxeando con el tiempo; resérvanle los cuerdos la otra metad de la potencia que sabiamente duplicó la común madre. Es el engaño mui superficial, y topan luego con él los que lo son. El acierto vive retirado a su interior para ser más estimado de sus sabios y discretos.

Mirar por dentro. Aforismo 146.

Oráculo manual y arte de prudencia. Sacada de los Aforismos que se discurren en las obras de Lorenço Gracián. Baltasar Gracián. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes

Porque, ¿cabe esperar que la próxima obra que se escriba sobre Chaves lo sea con decoro, con savoir faire, con rigor -con la mínima exigible honestidad intelectual, en suma, de la que el reportero sevillano es -más que de sobras, acreedor ?  Veremos...

Alguien tenía que decirlo... podría haber afirmado G. Orwell.

PS DE LAS 7:30h del 09OCT2023 (1º). Por supuesto, no estoy exento de error; no hay en ello contradicción alguna con lo que he expresado.

PS DE LAS 7:15h del 10OCT2023 (2º). Y escribo porque sigo recibiendo datos novedosos que me incitan a seguir en la indagación, como los que acabo de incorporar a la entrada precedente, que ahora va numerada de este modo [181-3*].

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[181.3*] CHAVES NOGALES MERECE UN RIGOR Y UN 'SAVOIR FAIRE' QUE SE LE NIEGA... (Chao, Y. Morató&Co.)

*El lector tendrá información suficiente del porqué de este * más abajo, en DOS. Dado el panorama que contemplo me veo obligado a presentar una firma autógrafa de Chaves Nogales de este modo casi procaz... que ruego se me disculpe. La redacción precedente, daba comienzo tras esa primera cenefa a pie de imagen.

Reproducción, maltratada por partida doble,
de la firma del reportero sevillano (marzo de 1939)
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Chao, Yolanda Morató (&Co.). Lástima de ocasión perdida...

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(CONT. DE 181.2) 

7. He abordado en las dos entradas anteriores, en una primera aproximación, lo que concierne a la omisión de datos positivos -contrastables, verificables, y conocidos por Yolanda Morató, de las circunstancias en las que Chaves Nogales fue evacuado de Burdeos al Reino Unido.

Lo he hecho porque, como poco, Yolanda Morató ha sido destinataria de mis envíos de los artículos dedicados a Chaves; de todos a partir de aquel primero del que di prueba en 181.1. Que los haya leído todos, o no, es cosa suya ... Del 1º de los dedicados al Savoy, no cabe duda puesto que lo cita en su libro.

...un saber no compartido es de la más absoluta esterilidad;
 apocarlo, o sofocarlo, una canallada (24/09/2022)


En esta analizaré de manera sucinta las primeras páginas del libro de Yolanda Morató y lo que me sugiere su lectura. Si alguien opina que lo hago por despecho, le diré: 'Sí señor'. Cierto. Si alguien ve la mera aplicación del mismo patrón que el aplicado al escrutinio del capítulo "UN NUEVO DESTINO: INGLATERRA" (el que Maribel Cintas dedicó a la cuestión en la ultima edición de su biografía de Chaves; es decir, antes de que yo diera a conocer ninguna de mis averiguaciones), le diré: 'Sí señor'. Cierto.

Quiero decir exactamente que, como no puede ser lo uno y lo otro a la vez, voy a dejar completamente de lado esta cuestión, y que cada cual haga de su capa un sayo: no está en mi mano privar a nadie del ejercicio de su libertad de opinar, ni, si lo desea, el fundirse con lo más profundo de la naturaleza a través del placer de emitir un sonoro rebuzno en la dehesa más próxima. O de su agrado. Vayamos pues, a la almendra de la cuestión; o al rábano, y desechemos sus hojas. 

Para el buen seguimiento de mis comentarios, que por lo general solo resultarán comprensibles si se tiene a mano el pasaje completo al que hagan referencia, señalaré el cardinal que le corresponde al párrafo en el libro* de Morató, más en concreto, en su Prefacio (donde por supuesto no están numerados), con sus primeras palabras 

*Que, por cierto, carece de índice onomástico

UNO. Los últimos años de vida en el exilio...

Morató se refiere, en consecuencia, al período que transcurre desde su llegada a París (nov/dic 1936) hasta su fallecimiento en Londres (mar 1944), como ya indiqué y a pesar del señalamiento expreso de la portada: 1940-1944, creo haberlo dicho. 

En el mismo párrafo, YM escribe que ... 

... ha habido cierta tendencia a despacharlos con ligereza y poco rigor. Desde luego -en mi opinión, eludir 'datos positivos -contrastables y verificables, y conocidos', es manifestación concluyente de una falta de rigor en la que es palmario que ha incurrido la propia autora. 

... los testimonios de su hija mayor... permitieron conocer sus andanzas justo hasta su destino final, Londres. De dudosa exactitud: de sus andanzas, desde que abandona París hasta que se embarca en Burdeos, sabemos lo poco que él dice en La agonía.... Abandona París -a última hora del martes 11 muy posiblemente aunque él no lo indique, para emprender un viaje frenético*. Pasa por Tours, llega a un rincón de los Pirineos, se pasea por las inmediaciones de las terrazas de los cafés de Biarritz y San Jean de Luz una vez que los alemanes han desfilado por los Campos Elíseos, y regresa a Burdeos, donde, al caer la tarde del domingo 16 está por un tiempo, con otras personas no identificadas, en el despacho del Sr. Mandel (ministro del Interior en el gabinete Reynaud, cuya caída certificó el derrumbe de la IIIª República) en la prefectura de Burdeos. Al alba del 17, a bordo del HMS Berkeley le ve largar amarras en los muelles bordeleses de Chartrons,  para surcar, primero la Garonne, luego, tras el encuentro con la Dordogne, la Gironde, hasta cubrir las 60 millas (aprox.) que le separan de la Pointe de le Verdon, el extremo S del estuario. 

*A mediodía del martes se cerraron todos los bistrots; escribe como lo haría un espectador, el papel que no dudo que le tocó jugar en esos momentos. Pocas líneas después, señala Día y noche... 4 filas de vehículos obstruían las salidas de París, otro dato vivido, no albergo duda; es precisamente lo qué el azar le deparó. 

De sus últimas 'andanzas' en Francia no tenemos más certezas, que yo sepa; andanzas de las que su hija Pilar posiblemente supo cuando leyó por vez primera La agonía..., si bien sí que tuvo noticia de que su padre llegó hasta su destino final, Londres, tras un viaje en barco. Parco, muy escaso, exiguo, conocimiento.

DOS. A partir de la etapa de París... 

El período galo de Chaves concluye nada más pisar territorio británico, es decir cuando accede a la cubierta del HMS Berkeley (poco después de las 6h de la mañana [EUT] del 17 de junio de 1940, porque para entonces el alba ya había despuntado [véase rectificación en PS 2]), pero -he de insistir, desde la noche del 11 al 12 hasta ese embarque lo que conocemos es prácticamente nada, cosa que me resulta harto sorprendente.

Chaves conocía a la perfección el valor de su testimonio como fuente histórica; ¿por qué evitó dar los mínimos detalles?; ¿solo por cautela, o a causa de la erosión del ánimo que supone (i) el vivir como él vivió -dejando atrás todo, todo salvo lo indispensable-, esa segunda derrota de la causa de la libertad que enarbolaba por bandera; (ii) atisbar bien a las claras, sin esperanzas, o con las mínimas, lo que se les cernía, un futuro segundo exilio sin posible reencuentro con los suyos, opción esta que adopto*? De esos 10 días que van desde la 0:00h del 12 (EUT) hasta alrededor de las 22:30 (UKT) del 21, Pilar Chaves, en contra de lo que parece afirmar YM, no pudo darnos a conocer en detalle sus andanzas porque nada supo de ellas, salvo que -finalmente- su padre se salvó y llegó en barco al UK (detalle que he leído en algún lugar del libro que comento, y que no indico con la precisión que desearía hacerlo porque las búsquedas en el Morató/Renacimiento son una pesadilla: no concibo cómo un libro con pretensiones se ahorra un índice onomástico).

*Ayer, 09OCT2023, leí un correo procedente de los AN franceses recibido a última hora, con señalamiento de restricción de uso, copies délivrées à usage privé uniquement, que trataré de dejar sin efecto. Su contenido me ratifica esa opción causal que señalé en Chaves, a la vez que me indica bien a las claras su escasez de miras. Porque tan solo contemplaba ahí el sentimiento que Chaves podía albergar  por él mismo, pero ¿y los demás allegados de su entorno? No era solo su esposa e hija: también estaban -o habían estado desde poco más de un año antes, su hermano Arcadio y un sobrino -hijo de una hermana, cuyo nombre también era Manuel. Confieso de modo formal que es la 1ª vez que tengo noticia de esas personas. Si alguien supiera algo de ellas, le agradeceré que comparta conmigo sus datos, si le parece.

Prosigue YM, al contrario de lo que se ha declarado... Y. ..., ¿por quién, dónde, cuándo? Son datos que es preciso poner sobre la mesa por respeto al lector; ¿qué razón se puede aducir para sustraérselos? Detesto el lenguaje sinuoso, cargado de insinuaciones o alusiones veladas, por opuesto al que me ha sido familiar en el estudio de la Física y porque aboca al lector a un limbo de incertidumbres. Lo que pretendo es estar ante -no frente- una autora y un libro, no ante una mesa de juego un crupier que se las sabe todas y juega con la ventaja de administrar su arcano cuando y como le venga en gana: por honestidad intelectual, las cartas deberían estar expuestas bien a las claras sobre la mesa de lectura. 

... la mayor parte de los textos previos a su exilio (uno, yo mismo, puede considerar que Chaves afrontó dos exilios; su sino en París era, con toda probabilidad, devenir francés de adopción, si es que ya no lo era en junio de 1940 -que lo desconozco...; no creo que, llegado el caso, hubiera optado u optara por ser apátrida. Y de ser así, ¿a cuál de ellos se refiere YM?) están disponibles en red

Están disponibles..., ¿y...?. Todas mis averiguaciones proceden de la red, bien por acceso directo a las fuentes, bien a resultas de las respuestas recibidas de numerosas bibliotecas e instituciones. ¿Es exigible que todas las personas que han (hemos) escrito sobre Chaves, Maribel Cintas en concreto, tengan (tengamos) tus mismas destrezas en materia de conocimiento de idiomas y de manejo de los recursos informáticos? ¿Eso sería merecedor de reproche...? ¿Acaso no gozas de la ventaja que supone caminar por senderos francos que otros, previamente, han desbrozado o, incluso, roturado?  ¿No es más oportuno al caso que yo te reproche tu distanciamiento a la vía puramente positiva de presentación de la prueba que avala cada proposición que pueda ser puesta en tela de juicio, y tu desechar mis aportaciones, salvo la ya referida excepción? 

TRES. Como se demostrará..., un considerable número de ideas esbozadas en la única biografía esbozada  publicada y reeditada hasta ahora...

Vamos a ver, Sra. YM, ¿qué problema le plantea a Ud. señalar de modo explícito, no velado, los datos que corresponden a esa biografía que cita? ¿Cree Ud. que todos sus lectores están al cabo de la calle de lo que se ha publicado y editado acerca de Chaves? De nuevo, ¿cree Ud. que ese lenguaje velado, alusivo, que dice sin decir, está teñido de elegancia, valentía y savoir faire?

Ud. recibió mis notas al citado Escrutinio; yo mismo se las remití: afronté aquello párrafo a párrafo, a cara descubierta, y sin miramientos en cuanto al rigor científico que aplicaba. No tuve ningún problema en hacérselo saber a la propia Maribel, que lo encajó con una elegancia, un savoir faire, sin parangón. Y que no encuentro en Ud. 

Maribel fue pionera y, como tal, sujeto de todos los azares y desventuras que empañan una gloria que resplandece por encima de todo: no hay quien suprima por nunca jamás su puesta encima de la mesa el legado periodístico de Chaves Nogales hace ya unas buenas décadas... Maribel es historia porque se lo merece.

No es preciso que la defienda ..., o sí. Lo haré siguiendo la senda que tomó William Chislett, al señalar la impostura en la que se hizo caer a García Trapiello, o que Andrés abrazó de buen grado, porque lo cierto, que yo sepa, es que hasta hoy no ha salido a decir que es mérito de Maribel Cintas y no suyo el haber puesto a Chaves en la palestra de una manera que abrió una vía que a muchos -o todos, porque, ¿quién la ha podido evitar?- nos ha guiado desde entonces. No es cierto que..., dijo William como tantas veces he referido. 

Porque el colmo, la apoteosis de este estilo que encuentro deplorable por poco transparente, casi insidioso, llega al final del párrafo CUATRO, y del Prefacio. Tras señalar los cientos de artículos de agencia hasta ahora desconocidos, que se citan por vez primera en estas páginas, YM, en lugar de recrearse en el hallazgo y sacarle jugo en pro de su propia gloria, aprovecha la ocasión para soltar un mandoble formidable. Lo hace al asegurar que, a resultas de su aportación, la 'Obra periodística completa' que teníamos de Chaves no es otra cosa que una especie de 'Media obra'. ¡Ostras!: es como decir -sin decirlo- que la caja roja de Asteroide/Garmedia, la de la Obra Completa (1925-1944) de Chaves Nogales en la que YM aparece como partícipe, lo es a ... ¿un 85%?; no seré yo quien cuantifique el % cuando la vara de medir la tiene Y. M. ...

 He comenzado en la p. 9; voy por la 12. Vale. 

Si he de estar ojo avizor para ver qué es lo que se escribe, qué es lo que va entre líneas, qué es lo que se omite, qué es lo que se insinúa, etc., ...  en lo que me queda del libro, tendré que dedicarle poco menos que un mes: es un lujo que no me puedo permitir... ni esfuerzo que me valga la pena realizar. 

No me parece que un libro -el de Y. Morató- sea el lugar adecuado para un ajuste de yo que sé qué cuentas -es la impresión que he sacado por el aguacero vertido sobre Maribel Cintas-, por alguien que, además, hace el libro por encargo.  

Mis coordenadas intelectuales son muy otras, aparte de que no faltan brillantes comentaristas con mucha mejor pluma que mi Parker, así que, adelante con los faroles: tienen el campo expedito, les cedo la iniciativa de mil amores.

Chao Yolanda..., qué lástima de ocasión perdida esta tuya.

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PS 1. (9:35H, 11OCT2022) Esta entrada está recibiendo un nº inusualmente alto de accesos -que espero sean lecturas, sin alcanzar aún el centenar..., así que modestia muchacho, no te encumbres, me digo. Y así, de manera modesta, le ruego al lector que me permita insistir en un hecho: que esta es la 3ª de la serie 181, de cuya lectura se puede obtener una panorámica mejor ajustada que -pienso, la que aporta un eslabón. Estos son los enlaces: 181-1181-2; y 181-4. Gracias, lectores.

PS 2. (16:55H, 11OCT2022) Siempre y cuando no hubiera pasado la noche en el barco, algo nada descartable, que me ha rondado la mente, y que -en el momento preciso, dejé de consignar. Ahora, rectifico.

2023/10/04

[181.2] A VUELTAS CON Y. MORATÓ (Y SU CHAVES NOGALES), MÁS UN DESLIZ DEL SEVILLANO...

Por cierto, ¿alguien ha dado cuenta de un flagrante desliz de Chaves en La agonía...?

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Escribo por el deseo de ver las cosas como son para hallar los hechos verdaderos y almacenarlos para la posteridad. '... porque hay ... algún hecho sobre el que deseo llamar la atención'. Y mi preocupación inicial es lograr que me oigan... me he visto obligado a convertirme en una especie de panfletista. Por qué escribo, G. Orwell

En la nebulosa Chaves Nogales, la mejor manera de que se ignore un dato novedoso es publicarlo y tratar de darlo a conocer. Paráfrasis de M. Azaña, según cita de Y. Morató 

 Suplantar el positivismo se llama ignorancia; evitarlo, ilusión. Pourquoi des philosophes? Jean-François Revel.

La fama es efímera; lo que perdura es la infamia. The Insider (película de 1999)  

∞:∞∞:∞

(CONT DE 181.1)

2. Hace ahora 10 años en 2013– tuve los primeros indicios de que una carta que Alexis de Tocqueville envió a su hermano 'Edouard' (sin acento) desde Nueva York, el 20 de junio de 1831, permanecía sin publicar. Alcancé la certeza unos tres meses después mediados de diciembre, y ante el rechazo que suscitó mi intento inicial de que se publicara en Francia en primer lugar (un correo, y sucesivos, de diciembre de 2013 al entorno de la dirección de edición de la serie "Obras Completas de Alexis de Tocqueville" editada por Gallimard, y a varias publicaciones de variado tenor), encontré acogida en la revista Eikasia (que ya antes había aceptado algún otro artículo mío). La publicó en el nº 55, marzo de 2014 (añadiré un enlace válido al artículo cuando sea posible; en estos momentos Eikasia realiza cambios en su web que me lo impide).

Composición a partir de un pdf del original

 La nebulosa Tocqueville se mostró impermeable; refractaria por completo, clamé al cielo, pero no me oyó...  El lance, en pleno S XXI, ha sido de transcurso bochornoso, puramente galileano en cuanto a la negación de registros contrastables. Cinco siglos después de aquella infamia: el Neovaticano Tocquevilliano, constituido por un conglomerado de intereses diversos Les Éd. Gallimard, la Tocqueville Revue aquí con argumentos pueriles, firmados de manera vicaria por una persona ajena al comité de redacción, la Tocqueville Foundation, todos, todos salvo el Profesor JL Benoît -y la lista es larga, rechazaron la averiguación que les daba a conocer, o la ignoraron, que para el caso es lo mismo en cuanto a los efectos. Ana de Palacio, presunta compatriota que ahora mismo (8:30h del 30/09/2023) prosigue como componente del equipo 'The governance of the Tocqueville Found.' (https://tocquevillefoundation.org/about-us/ ), por ejemplo, ha demostrado nula cortesía a la hora de responder a mis correos. 

El personal, se encarama al bordillo de una acera, y ¡zás!, se obnubila al creer que están en un podio olímpico a punto de tocar el cielo con las yemas de los dedos, cuando su verdadero realce se mide por escasos cm. sobre la cota '0'. ¡Pobres!   

Je suis dans une ignorance terrible de toutes choses... . Je vois ces effroyables espaces de l'univers qui m'enferment, et je me trouve attaché à un coin de cette vaste étendue, sans que je sache pourquoi je suis plutôt placé en ce lieu qu'en un autre, ni pourquoi ce peu de temps qui m'est donné à vivre m'est assigné à ce point plutôt qu'à un autre de toute l'éternité qui m'a précédé et de toute celle qui me suit. Je ne vois que des infinités de toutes parts, qui m'enferment comme un atome, et comme une ombre qui ne dure qu'un instant sans retour. Pensées (B. Pascal).

No por ese inmisericorde ninguneo de gente zafia de modales -todos cuanto sin excepción se acogen al sagrado del silencio, la conducta más despectiva que conozco, M. Guillaume de Tocqueville incluso- cejé en el empeño. Seguí ofreciendo la averiguación en vano y por doquier, (la lista de destinatarios, revistas y otros medios, también es muy larga), hasta que, a finales de marzo de 2022 casi a punto de rendirme me dirigí a sendos periódicos de La Manche; La Manche Libre era uno de ellos. 

El 1 de abril, M. Philip Bertin, periodista de esa casa, me mostró su interés por conocer detalles del asunto. El 4 de junio, el periódico dedicaba al scoop una plana firmada por Alain Fergent (pseudónimo de P. Bertin)

El periodista y su periódico reconocían así, -de modo inequívoco, solemne, formal-, que mis asertos "iban a misa"...  

Composición a partir de un pdf de la plana original (4jun2022)

∞:∞∞:∞ 

3. "Profe, da gusto oírte cuando no hablas de Física, porque se te entiende todo", proclamó a viva voz uno de mis alumnos un día. El asentimiento fue general. Y la daga, de doble filo, dejaba en claro que, cuando no se trataba de Física, el lenguaje que empleaba les resultaba claro, inequívoco y comprensible. Si la materia del asunto era la propia de mi trabajo, la cosa se ponía cuesta arriba, y no precisamente por el lenguaje al uso; todo lo contrario. Si en lo extra-académico me expresaba con nitidez, era a resultas del denodado esfuerzo que hacía cuando la cuestión era puramente académica; el desvelo por transmitir, y que lo transmitido fuera aprehendido, ha sido una constante en mi vida profesional, y como no podía ser menos– le he dado continuidad en este que por el momento es mi santuario en el que decir con la mayor pulcritud, precisión y rigor a mi alcance

Digo esto porque uno sabe exactamente qué dice, qué expresa –o trata de decir/expresar, pero no qué escucha el interlocutor, o qué interpretación da a lo que oye. Lo mismo cabe decir de lo que se escribe y lee, al menos en cierta medida. Y digo, diré, negro sobre blanco, exactamente lo que digo o llegue a decir, perogrullada que solicito sea admitida porque, si quisiera expresar otra cosa, lo haría sin más miramiento y con los recursos de que dispongo. Creo que está claro, ¿no?.

Por que no quepa duda, el insistir hasta la extenuación también procede de mi época de estrado y pizarra. Y en cuanto a la claridad en la expresión, la serie 143 [143.1143.2143.3 & 143.4] lo atestigua. Analicé en ella con sumo esmero, de modo rotundo e inapelable, las razones por las que tildé de despropósito el fallo del 1er Premio Internacional de Periodismo Manuel Chaves Nogales (apartado 'prensa'), hecho que, en mi opinión, tiznó de por vida el certamen. Creo que esa prosa me ha granjeado el alejamiento de personas que loaban mi independencia en el decir, hasta que a ellas les tocó aguantar su vela...; pero procuro que mis asertos tengan un muy sólido fundamento.  

No obstante, si alguien quiere ver la hierba crecer, los tres pies al gato, irse por los cerros de Úbeda, Baeza, Linares o La Carolina el rosario de topónimos me suena a Mozart, allá él y el ejercicio provechoso o estéril de su acción. Y en todo caso, si hasta aquí, como en lo que prosigue, algo no se entiende, existe la posibilidad de solicitar la oportuna aclaración vía "comentarios": trataré de no defraudar. 

Por acabar con este aperitivo, si al ilustre prologuista García Trapiello es un decir le parece pueril, deplorable, y carente de literatura mi burda imitación de los calificativos, a trios, con los que el ampurdanés J. Plá salpicaba sus líneas, que se fastidie y a otra cosa. Lo mío es cosa torpe, mero juntar letras; la suya es literatura de la buena la del ejemplar prólogo a Madrid, 1921. Un dietario, por ejemplo (véase, por supuesto si apetece, [175]); no hay color en la comparación, lo acepto por descontado.

En lo de hablar claro, ahí sigo. Porque el lenguaje, hasta nuevo aviso, está hecho para entender y ser entendido, estableció -inapelable- Jean-François Revel en su panfleto Pourquoi des Philosophes?  (Julliard, Paris, 1957)

∞:∞∞:∞ 

4. Pero, regresemos al libro. Cuando, como señalé en 181.1,  Morató proclama de entrada que,  respecto de Los últimos años de la vida en el exilio de Manuel Chaves Nogales [1ª línea de l texto; p. 9] ha habido ... cierta tendencia a despacharlos con ligereza y poco rigor [6ª, de la misma p.], el lector puede caer sin más en la creencia de que el libro que se tiene entre manos es todo lo contario: serio, riguroso.

En mi caso la ilusión se desvaneció casi al punto, nada más leer que 'Esta investigación se centra, pues, en corregir de forma precisa la manera en la que que Chaves Nogales escapó a Inglaterra...' (p. 12). 

¿Corregir...? ¿Qué...? ¿Cómo...? Pfv, querida Yolanda, ¿a quién corriges...? Desde luego a F Caro, investigador independiente gracias al cual..., no. No le corriges en nada en absoluto, o, caso contrario, deberás señalar en qué y dónde.  ¿Es riguroso universalizar de ese modo...? O, si universalizar no fuera la pretensión, ¿por qué no expresarse de modo claro y preciso? Porque, como dijo JF Revel ... 

El colmo lo hallo  prácticamente al comienzo (una p. de cortesía -la 13- con el título que corresponde a "1", prosigue al prefacio (pp.9-12), al que, en p.15, le sigue el apartado 'Emery Reves y sus conexiones...'). Al llegar a la p. 19, me topo con estos pasajes:

...como se demostrará con detalle en estas páginas...
Y una nota 'obsequiosa' para con su editor...

Veamos. Chaves -en La agonía..., cita a los colegas y personas que cita pero, hasta ahora, no lo he visto citado por ninguno de ellos de manera expresa (si bien tengo la impresión de que está citado, sin que su nombre aparezca tal cual, en algunos pasajes de cuya autoría daré noticia en su momento).

Y en cuanto a demostrar, veamos. En época de estrado y pizarra, les 'demostraba' a mis alumnos el Teorema de Pitágoras mediante la construcción geométrica, sencilla, elegante e intuitiva, que quizá recuerden Uds. 

Demostración gráfico-geométrica del Teorema de Pitágoras.
  Imagen de M. García Ruiz 
http://juegos-de-mates-manuel.blogspot.com/  
  

Hacía entonces uso de una demostración preexistente que, en algún momento, fue novedosa. En su alumbramiento constituyó una demostración en el sentido de que, por vez primera, se establecía como tal.

¿Qué carácter se le puede, o se le debe, atribuir al 'se demostrará con detalle' de Yolanda en su contexto? No aventuro opinión propia. Me he dirigido a tres bibliotecarios, a los que les he presentado la misma imagen, con esta pregunta y apunte:

¿Qué interpretación será la que cabe esperar de un lector 'ordinario', suponiendo que esta calificación tenga un significado aceptable? (desde luego que inequívoco no lo es)
Cabe pensar que el autor va aportar pruebas concluyentes, a la vez que novedosas; pero también que va a aplicar una demostración -en todo o en parte- preexistente.
Creo que Ud. atesora suficiente experiencia como para comprometer una opinión, que le agradezco por anticipado.
'Lo mejor, pregunte Ud. al autor'... se me responde; pues si el autor lo tiene a bien, sirva esto como solicitud y que se pronuncie. Y si no lo hiciera, que cada cual formule su hipótesis.

En lo que no cabe apelación alguna es que antes de que Y. Morató publicara su libro, ya se habían dado a conocer pruebas concluyentes de lo que ella dice que va a demostrar. Tan concluyentes que, a resultas de las mismas, ella atribuye certeza (o da toda la impresión de que lo hace) a un hecho subsecuente: el alojamiento de Chaves en el Savoy al anochecer del solsticio de verano de 1940. Son, precisamente, las aportadas por mí en las entradas ya comentadas.

Desde luego que no considero que Y. Morató aporte pruebas preexistentes de esa cesta porque, de hacerlo, debería haberlas citado y no lo hace; he de concluir en consecuencia que realiza 'otra demostración'.

Lo que sucede es que, entre dos demostraciones no coincidentes acerca de un mismo hecho, será más sólida la que aporte pruebas más sólidas. Y caso de que la comparación entre la solidez de una y otra arrojara un resultado incierto, sugiero apelar al recurso de la navaja de Ockam. Y si este tampoco elucidara la cuestión, que el lector decida tras su comparación, y asunto zanjado.

∞:∞∞:∞ 

5. Respecto de la solidez y rigor del relato que he elaborado y ofrecido, y de las fuentes que lo avalan, las tildo de formidables, fuera de discusión. De modo sucinto, he asentado que:

Chaves Nogales -junto a un grupo de franceses privilegiados, como les denominó Alexander Werth- embarcó en el HMS Berkeley al alba del lunes del 17 y por qué el HMS Berkeley llegó a los muelles de Chartrons-Burdeos la víspera. Cómo, hacia las 12:30h, en la Pointe de Le Verdon, el extremo S del estuario de la Gironde, el Nariva (un mercante) se acostó o viceversa, al lado del HMS Berkeley, para que el pasaje de este transbordara al mercante (el hecho del acostamiento en sí era absolutamente previsible porque ¿de qué modo, si no, se realizaría el transbordo trepando por escaleras de cuerda, como refiere Geneviève Tabouis? Lo que sucede es que una pasajero del Nariva, al que llegó en uno de los pequeños barcos matriculados en aquel puerto, vio el acostamiento desde la orilla; es una fuente que he conocido por Morató, precisamente, y de la que por ahora, no doy más detalles); que el Nariva, y oros mercantes cargados con refugiados, incluso repletos, como el Madura (barco mixto, pasajeros/mercante),  permanecieron fondeados hasta que hacia las 18h (EUT) del 18, el convoy (s/un registro de los The National Archives del UK, el nº SL 34, compuesto por  28 navíos. En la descripción del registro, aprecio un dato erróneo del que acabo de informar a los NA, ya que dispongo de la prueba documental que lo acredita)  se hace a la mar, posiblemente escoltados por un navío de guerra que no he identificado. Que el HMS Arethussa, destacado en el estuario para proteger su entrada, al poco del inicio de esa navegación '... ordered (el 18, a las 19:25h, UKT) WHIRLWIND to intercept and escort MADURA out from Le Verdun to Falmouth and NARIVA to B.C. (Bristol Channel) both carrying refugees'; que 'WHIRLWIND reported (el 19, a las 20:25h UKT) MADURA e.t.a. (estimated time of arrival) Falmouth 10:30/20 with 1370 refugees. NARIVA 265 for Bristol Channel'; que en un momento no precisado, pero no lejos de puerto de destino, el Madura ha de navegar en solitario rumbo a Falmouth, puerto más cercano al radio de acción de la aviación nazi, al que arriba 'Le jeudi 20 juin au matin, nous sommes entrés en rade de Falmouth', relata A. Werth, uno de sus pasajeros, en tanto que el preciado pasaje del Nariva sigue escoltado y navega a uno de los puertos más occidentales del UK, lo más alejado posible de la Luftwaffe; que el 20, tras 9h y media más de navegación que el Madura, notablemente más cargado, 'WHIRLWIND escorting NARIVA arrived Milford (20:02 UKT)', fondea, y desembarca su pasaje a primera hora de la mañana del 21.... Tras ser recibidos por una persona adscrita al FO, tomarán un tren que les llevará a Londres.

Una estimación de velocidad de 12 nudos para el Nariva, supone una distancia recorrida mayor de unas 115 millas; si la velocidad la estimamos en 13 nudos, unas 123,5 millas más de navegación (si considero las referidas 20:25h como el momento en el el Madura se separa, el Nariva y su escolta ejecutan casi un día más de navegación: 23h 37min; es decir se separaron a unas 300 millas de Milford y a poco menos de 150 de Falmouth, distancias meramente estimativas). La velocidad del Madura, con el sobrepeso* con el que navegó (ambos barcos desarrollaban una potencia nominal similar, en torno a los 1100 y 1100 NHP respectivamente), la estimo en unos 10,5 nudos (a plena máquina, para alcanzar puerto lo más rápidamente posible), velocidad que condicionó la del convoy conformado por los dos mercantes y su escolta). Los cálculos me conducen al resultado siguiente: para el Nariva, la relación potencia motriz/ tn de desplazamiento  era un 12,9% superior a la del Madura, es decir, su velocidad máxima era, en condiciones ordinarias de carga y en términos nominales, superior. *Las 1370 personas que evacuó el Madura (según los AWD), en base a un peso medio de 70 kg/persona, representa una sobrecarga añadida de 95,9tn, de la que no puedo señalar con precisión qué % de incremento representa al desconocer la que de origen  transportaba el mercante.

Imagen extraída del Dossier CHAV_NOG_ÚLTIMO GRAN VIAJE

Un dossier de título CHAV_NOG_ÚLTIMO GRAN VIAJE, que he remitido a varios destinatarios presenta una síntesis de mis averiguaciones. Por ejemplo, lo recibieron y acusaron recibo del mismo, a principios de abril de 2022, un Director de un Instituto Cervantes y la madrileña Logia Mozart -a la que había preguntado acerca de Chaves. La imagen del Nariva que sigue está extraída del mismo (p. 16).

El Nariva

El Madura

En cuanto a los fundamentos de la 'otra demostración', la de Y. Morató, lo único que he constatado es que no se incluyen fuentes que considero esenciales entre las que recoge la muy abundante bibliografía que aduce. Por ejemplo, los Admiralty War Diaries. World War 2, que ofrecen las precisiones horarias de la navegación del Nariva y del MaduraEn todo caso, la comparación la ha de realizar quien coteje uno y otro relato.

Ahora bien, en ocasiones, Morató se muestra ciertamente puntillosa en extremo. Por ejemplo, cuando señala que el Madura -además era un liner, no un destroyer (p. 20); ni idea de a quién corrige... 

∞:∞∞:∞ 

6. Pero, ¡que me despisto de modo involuntario...! Es posible que algún lector haya llegado hasta aquí por el destello del anunciado desliz; que me disculpe pfv. la tardanza en exponerlo... Desde luego que proclamo de modo  formal que desconozco por completo si ya ha sido puesto en evidencia.

 Dice Chaves, "… cuando al constituirse el gobierno Pétain comprendí que iba a ser entregado a los alemanes… busqué un rincón rural apartado en un repliegue de los Pirineos donde ocultarme" (p. 1701, Obra periodística III. Ed. Cintas/Diputación de Sevilla, 2013).  

¡Imposible! El gobierno Pétain se constituyo al atardecer del domingo 16, y Chaves embarca al alba del 17 en el contratorpedero de mis penas, así que es imposible que –en el intermedio– busque en un apartado rincón del Pirineo… Además, de sobras había comprendido mucho antes que sería entregado: ¿por qué, si no, abandona todo -todo-, y relega París a uno de los rincones de su memoria? 

En consecuencia, la calificación de sorpresiva para la familia que asigna Morató (p. 17) a la manera en la que Chaves se desprendió de todo -todo- lo que tenía en París a la hora de marcharse, salvo lo indispensable, no la encuentro ajustada. Él y los suyos sabían de sobras qué se cernía -la drôle de guerre había acabado un mes antes, el 10 de mayo, con la invasión de los países del Benelux por parte de los boches, y la marcha de la guerra no dejaba lugar a dudas. Que Chaves se tuviera que largar era cosa cantada, ¿qué pudo tener su salida de sorpresiva para la familia? 

(¿Continuará en 181.3?)

[196] "LA DERROTA DEL CONOCIMIENTO" (O, MEJOR, AL SOMETIMIENTO POR EL EMBRUTECIMIENTO)

    “…mi profesión nada confusa, sin comprender cuál es su cometido, transformada en mero servicio de guardería la más de las veces...”   ∞:...